Cartilla de racionamiento
Miguel Ángel Vellisco Bueno
Terminada la guerra civil española de 1936-1939, se impone una época que se caracteriza por sus grandes calamidades (gran escasez de alimentos, la carestía de precios y el descenso del poder adquisitivo de los salarios). Esto obliga al gobierno a intervenir en la producción agraria y crear un sistema de racionamiento para poder suministrar productos de primera necesidad entre la población, a través de las llamadas “cartillas de racionamiento”, fijándose la ración diaria de 400 grs. de pan, 125 grs. de carne, 25 grs. de tocino, 75 grs. de bacalao, 200 grs. de pescado fresco, 100 grs. de legumbres, 250 grs. de patatas, 50 grs. de aceite, 30 grs. de azúcar, 10 grs. de café.
Paralelamente a esta medida aparece en todo el territorio nacional un mercado negro de abastecimiento y venta ilegal, llamado “estraperlo”.
El poder político era totalmente centralista y para el control del país que recaía en el ministerio de la gobernación, se sustentaba en los gobiernos civiles, diputaciones y ayuntamientos.
Se nombraba un gobernador, encargado de administrar la provincia y dirigir la política de turno, fortaleciendo la autoridad estatal.
Bajo el liderazgo del gobernador estaban los diputados provinciales.
Por último los alcaldes, que a su vez eran simples gestores de la situación de miseria, carencias, ruina económica, falta de higiénica y sanitaria que les tocó vivir (en Cuenca solo había un hospital con 70 camas, para atender a toda la provincia: El hospital de Santiago) así como el paro, falta de profesorado y de plazas en los colegios. Aunque las aulas no llegaban a llenarse, debido a que desde muy temprana edad en cuanto podían valerse, los hijos de las clases más humildes se dedicaban a las faenas agrícolas.
En cuanto a los cargos políticos, normalmente eran ocupados por personas pertenecientes a las capas sociales de nivel alto o medio, a veces pocos dispuestos a dejar sus negocios o sus intereses profesionales, y de sacrificarse, para atender debidamente sus cargos políticos. Lo que trajo consigo la destitución por orden gubernativa de numerosos cargos en varios pueblos, ya sea por incumplimiento del deber, corrupciones, abandono de funciones, etc.
Por otro lado, por toda la geografía española, aparecieron una serie de agrupaciones de carácter guerrillero, formadas por personas normalmente de ideología comunista, conocidos como “Los Maquis”.
En la Mancha se formó la Vª agrupación de guerrilleros compuesta a su vez por tres partidas. La zona de acción de la primera que actuaba por los términos de Belmonte, S. Clemente y Socuéllamos estaba formada por: Sebastián Moya “Chichango”, como jefe de la misma, Juan Criado Acosta “Antonio”, Fabián Buedo Pacheco “Joaquín”, Pedro Morales Martin “Cantinflas”, José Sauquillo Rueda “Tarzán” y Alfonso Ortiz Calero “Magro”. En el año 1948 fueron apresados uno tras otro sus componentes.
El día 30 de septiembre de 1942 se constituyó en Belmonte la Hermandad Sindical de Labradores y Ganaderos. Al acto, importantísimo por su transcendencia para la Organización Sindical de F.E.T. Y de las J. O. N. S, asistieron cinco mil productores de todos los pueblos de la Comarca, Milicias y una Falange de Juventudes de la capital.
Por decreto de 27 de julio de 1943, se declara monumento Histórico Artístico a la antigua Colegiata de Belmonte.
En 1946 se establece en Belmonte la Academia Onésimo Redondo para titular a los instructores auxiliares con destino en el ámbito rural. Durante uno de sus cursos, en el castillo de Belmonte, nacía esta canción. Sus autores son desconocidos, pero con toda seguridad fueron miembros de la academia.
(Se recoge en el "Cancionero de Juventudes" de 1976).
Bajo el cielo, que besan los montes,
levanta al viento altaneras
sus invencibles banderas
la academia Belmonte.
Con la brisa matinal,
suben canciones al cielo,
prendidas en el anhelo
de un porvenir imperial.
Desde tus recias almenas,
llenas de luz y de sol
se divisa el horizonte
del porvenir español.
Por el campo, por la aldea,
por la sangre que campea
sobre su invicta bandera
arrulladas por el sol,
haremos la sementera
del resurgir español.
Las cinco flechas, en sangre teñidas,
serán cinco espigas,
que ricas cosechas de yugos y flechas.
Y muy pronto darán.
Bibliografia:
-Las Rutas Gerrilleras Vª Agrupación de Guerrileros de la Mancha. De Fco Alcázar Rubio,Javier Hernández Pérez y Tomás Escolar Moreno.
-El Final de la Guerra Civil y la Implantación dela Dictadura Franquista,Castilla la Mancha,1935-1945. De Damián A. González Madrid.
-Ofensiva, Bisemanario Nacional-Sindicalista 1942-1960.
Miguel Ángel Vellisco Bueno
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