Datos de la foto de la portada del libro LOS TRABAJOS Y LOS DÍAS

 

El otro día, y sin aviso, se publicó en la página de Facebook Rincones de Mota de Cuervo esta fotografía coloreada tomada de la portada de mi último libro Los trabajos y los días (tercer volumen de la Guía Secreta de Las Pedroñeras). La foto aparece restaurada y coloreada, y es de agradecer que hayan puesto la fuente de donde se ha tomado. Como desconozco el nombre de la persona que lo ha hecho pues desde aquí le damos las gracias, tanto yo como nuestro pueblo. Ha quedado chulísima y, aunque los colores (de las vestimentas, sobre todo) se toman de una manera arbitraria, el resultado es muy bueno como podréis observar. Nuestras paisanas salen muy favorecidas.

La fotografía en cuestión, de principios de los años 50, es un prodigio de composición (quizá sea de fotos Manolo, aunque esto no os lo puedo garantizar), con las tres mujeres posando ante la cámara con su cántaro apoyado en el ijar, la mano derecha colgando y la otra sujetando el cántaro por la zona de la boca. Realmente espléndida. Muy lograda (sin entrar en detalles).

La instantánea está tomada en la calle Montejano, ya cerca del Coso, donde estas mujeres se dirigirían a llenar sus cántaros del pozo del Pilar entrando por la calle Jábega. No faltan quienes se colocan detrás para salir en la foto como curiosos. En este caso, son mi tío Pedro Pacheco Belmar "Marcelo" (con boina y bicicleta) y un niño, con pantalón corto y jersey de pico, que es Justo de la Cueva Molina "el Chirre". 

Según información de Lina Cubero Sotos y Maricarmen Redondo Mena, que son quienes me proporcionaron (una por cada lado) la fotografía, las mujeres son, de izquierda a derecha, Jacoba Mena, María Cubero y Adriana Escudero.

En el interior del libro aparecen unas cuantas fotos más del Coso y de mujeres con cántaros, la mayoría realmente logradas. Si el libro dedica un capítulo al pozo del Pilar y otro a la vida en las casas y en la calle, no podían faltar tan singulares y castizas imágenes de ese añorado antaño que, ¡ay!, ya no volverá.

ENCARGA TU EJEMPLAR Y NO TE QUEDES SIN ÉL

(aviso para navegantes)

Y si no los tienes todavía: (hasta agotar existencias)