Pongo estas imágenes por el blog porque me han parecido insólitas e impactantes y, por lo tanto, me ha parecido interesante que quedasen registradas en él. Quizá puedan herir la sensibilidad de algunos. En este tiempo, y más aún por determinadas zonas, el campo está plagado de conejos, de modo que no es difícil (y a ciertas horas es muy probable) que, yendo con el coche por los caminos, se crucen estos simpáticos animalitos que dan nombre a nuestro país (España significa 'tierra de conejos'), que, aunque alegran el campo, también arrasan los cultivos en perjuicio del agricultor. Es el caso que, muchas veces, aun sin querer, pues uno atropella a algún ejemplar distraído. Este que vemos en la imagen fue atropellado por el coche y, al parecer, su dueño no se ha percatado de ello. Se ha abierto una brecha en la parte delantera del vehículo, debido al golpe, y el conejo ha quedado alejado en su interior. Cuando el dueño ha parado, un gato se ha introducido en ese hueco para dar buena cuenta del animalejo. Y ahí lo ha sorprendido la cámara de Pili, en la calle Alicia Gómez Jareño. Hemos pixelado la matrícula aunque a buen seguro al dueño le gustará tener conocimiento de estos pasajeros no invitados.
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