He aquí, amigos, una antigua receta tibetana que al parecer viene a ser algo muy parecido a la panacea. No dudé, desde luego, ni un momento en incluirla en ese viejo libro sobre el ajo que se publicó ya años ha. Me ha dicho quien la ha probado que es beneficiosa cien por cien y del que hablo lo hacía tan encendidamente que os prometo que casi llego a hacer alguna probatura. Sé que todavía estoy a tiempo, y vosotros, así que cuando queráis, y ya me contaréis. Por aquí os la pongo junto a un vídeo explicativo.
ÁCS
No hay comentarios:
Publicar un comentario