La abubilla - Aves de nuestra Mancha 2 (fotos originales de la zona)

por Job Moya Peraira

El Antiguo Testamento aporta valiosa información sobre el rey de Israel, Salomón, hijo de David, y su contexto histórico. También El Corán lo menciona, refiriéndose a él como el profeta Suleiman, hombre sabio, capaz de comunicarse con los animales, especialmente con las aves. Por dichos textos conocemos su romance con la Reina de Saba, que gobernaba los territorios actuales de Etiopía y Yemen (extremo suroccidental de la península arábiga). Se cuenta que fue la abubilla, de plumaje tan peculiar y llamativo, la que le cantó loas a aquella reina “hija de reyes, con largos ojos blancos y negros, causa de suspiros y caras largas", ensalzando su inteligencia, bondad y belleza. Salomón coronó a la abubilla por sus grandes favores y consejos, nombrándola "reina de las aves" y dotándola de un fétido olor, capaz de ahuyentar a los más temibles predadores. 

Se trata de un ave ampliamente distribuida por la región paleártica (Europa, Asia y norte de África), aunque en la mayor parte de Europa sólo habita en verano, invernando en el África subsahariana, India y sudeste asiático. En España se considera estival, pero puede verse en invierno en toda la franja mediterránea, Extremadura y comarcas menos frías de La Mancha. El grueso de individuos que crían en la zona pasa el invierno en el sur o levante peninsular o en las sabanas africanas, pero pueden verse algunos individuos invernantes en zonas abiertas y soleadas, si bien no más al norte de Villar de Cañas. El nombre científico (Upupa epops) reproduce su canto (onomatopeya de upupup... upupup... upupup). Su hábitat son los mosaicos agropecuarios: granjas con zonas de huerta y/o frutales, olivares, campos de cereal con almendros, lindes pedregosas, majanos y bordes de caminos cubiertos de hierba, etc. Evita tanto los espacios muy abiertos y pobres, como los bosques muy densos. Hace el nido en huecos de construcciones abandonadas, oquedades en árboles, montones de piedras, etc... 

Una glándula en la base de la cola le permite excretar un humor de olor muy desagradable y característico, lo cual ahuyenta a sus predadores; en la comarca da testimonio de ello la expresión "oler a abubillo". Además, los pollos suelen defenderse rociando de heces al intruso. Se alimenta fundamentalmente de lombrices, escarabajos, orugas y larvas de insectos, por lo que es considerada la mejor compañera del hortelano.

Los ejemplares de las fotografías fueron fotografiados en el "Monte Ardal" de Belmonte el pasado mes de abril.

JMP