por Miguel Ángel Vellisco Bueno
Los
artículos que aquí se recogen dan cuenta de la detención de unos partidarios de la conspiración contra el rey
Fernando VII por parte del general Riego, el nombramiento de unas canonjías de
la colegiata de Belmonte, un supuesto altercado contra un militar, una captura
de bandidos, un motín y fuga de presos
de la cárcel de Belmonte, el fusilamiento de unos reos, el asalto fallido de Belmonte, por parte de una partida de carlistas y el saqueo por los mismos de Villaescusa de Haro.
23
de Agosto de 1823 “El Restaurador”
El 18 de Agosto se
descubrió en Belmonte, una conspiración contra el Rey, proclamando a Riego, y
queriendo reponer la lápida constitucional; pero el Ayuntamiento parece
desplegó todo su nervio en favor de la justa causa, y prendió a ocho de los de
la trama. Si no se castigan estos excesos, y a los que la opinión pública tiene
marcados por liberales, masones, comuneros, irreligiosos y pícaros, vamos a
padecer mucho, y no creo ver muy distante la hora en que los pueblos tomen el
castigo por su mano, porque aquí están muy sobre sí, y hablan con mucho
descaro, tienen sus reuniones, y los realistas estamos viendo esto, y esperando
que la ley los castigue sin ninguna consideración.
Cuando esto pasa en Belmonte, nos preguntan de
la Mancha ¿Qué noticias hay favorables a los Liberales, que se les observa muy
contentos y orgullosos?...
19
de Diciembre de 1832 “La Revista Española”
REALES NOMBRAMIENTOS: Dos Canonjías de la
Colegial a don Agustín Pablo Moya, y don Francisco Vicente Gonzalo.
9
de febrero de 1834 “ La Revista Española”
De Belmonte provincia de Cuenca, nos ha
remitido un artículo el sargento1º de cazadores inutilizado D.Diego Bacete, que
por ser demasiado largo no podemos insertar integro. Compadecidos sin embargo
de la deplorable situación de este benemérito militar, haremos mención de
algunas de las causas que le han movido a solicitar su inserción. Parece que en
año 1823 trataron de asesinarle algunos individuos de dicho pueblo incitado por
cierto caballero poderoso; por fortuna pudo escapar de las manos de estos
furiosos, y a fines del año próximo pasado cuando ya regentaba el trono nuestra
inmortal Reina Gobernadora, presentó al Alcalde Mayor de aquel pueblo, un
escrito en que denunciaba aquellos delitos, y pedía la reparación del ultraje
que s ele había hecho. La providencia del Sr. Alcalde fue la de entregar el
escrito a la contraria y poner preso a este desgraciado. Nosotros no salimos
garante de la verdad de este artículo, pero si es cierto lo que expone, no
podemos menos de hacer presente a nuestro gobierno los males que acarrean
tantas y tantas autoridades que, arrogándose el poder de obrar por sí y ante
sí, ultrajan al desgraciado, que no tiene más auxilio que la ley, ni más
riqueza que su honradez.
12
de Enero de 1835 “ Revista Española”
De
Belmonte con fecha 7 de Enero dicen los siguiente: “Ayer tarde fueron
capturados en el pueblo de Villaescusa de Haro, y en sus propias casas, los
bandidos y facciosos que hace años tenían atemorizado este país, José Salas,
José Montoya, el famoso Pancha, y otro
célebre ladrón del Pedernoso”.
14
de Noviembre de 1835 “ Revista Española”
D. Antonio Álvarez
Baragaña fue regente de Pedroñeras ( en la provincia de Cuenca) en tiempos del
despotismo, la que sirvió con un celo propio solo de un hombre que simpatizaba
en aquel gobierno, bien lo demuestra la persecución que hizo sufrir á los
liberales de Belmonte, Mota del Cuervo, Almansa y otros pueblos, formando causa
á varios vecinos que tuvo encerrados nueve meses en Alcázar de San Juan,
Villarrobledo y otras cárceles; y su suerte la hubiera hecho este hombre muy
desgraciado, si el decreto de la Amnistía no hubiera concluido aquella; fue
encausado por carlista el indicado Baraguña, habiendo eludido su prisión, que
fue á verificar el alcalde mayor de Belmonte acompañado de los Nacionales
fugándose del pueblo donde residía…
(para saber más, por aquí)
(para saber más, por aquí)
27
de Febrero de 1836 “Revista Española”
Electores de Diputados por Belmonte (Cuenca):
el ex–Procurador don Mateo Belmonte, y el señor López, los dos de ideas
progresistas
2
de julio de 1836 “Revista Española”
De Belmonte (Cuenca) con
fecha del 29 nos escribe lo siguiente:
En la noche del lunes 27 se alborotaron los 39
presos que existían en estas cárceles; encerraron al Alcaide y se marcharon 33
habiendo sido maltratados los 6
restantes por aquellos. Entre los fugados hay seis desertores, varios ladrones y asesinos. Aquella
noche llegaron a Alconchel donde se constituyeron en facción al mando del
famosos ladrón Pedro García el del Ito; robaron al Alcalde y al Cura del
pueblo todo el dinero que tenían, ya a los vecinos hasta 28 mulas. De aquí
salieron inmediatamente una partida de Nacionales que unidos a los de la
Almarcha, Olivares y Cervera, dieron alcance a la canalla, aprendiéndoles 15
hombres, después de haber matado otros dos, sin desgracia ninguna por nuestra
parte. De resultas de este acontecimiento se han hecho varias prisiones en este
pueblo: veremos lo que se adelanta en las averiguaciones
6
de Agosto de 1836 “La Revista
Española”
mensajero de las Cortes
El Excmo. Sr. Marqués de Moncayo, capitán General de Castilla la Nueva , con fecha 5 del actual, se sirvió disponer fuesen
pasados por las armas los nueve facciosos, aprendidos con ellas en la mano,
cuyo castigo sufrieron el día 11 del mismo en la villa de Belmonte y de que se
dio cuenta en el Boletín Oficial del viernes 15 del corriente, con los nombres
y circunstancias de aquellos criminales.
Por disposición del
mismo Excmo. Sr. Capitán General de fecha 12 d esta mes, han sufrido igual
suerte en la villa de Belmonte , el día 24 del mismo, los reos Francisco Díaz,
Agapito Chacón y Antonio Rosalén,
fugados de las cárceles de la referida villa y aprendidos con las armas en la
mano por la Guardia
Nacional de Villamayor de Santiago, los cuales tuvieron parte
en los robos que cometió la facción en Alconchel y otros puntos el 27 del mes
próximo pasado
20
de febrero de 1840 “El Constitucional”
La provincia de Cuenca continúa en el mismo estado de
abandono, y va creciendo la osadía de los facciosos a medida que se aumenta el
criminal olvido en que la tiene el Gobierno. Parece, según refieren las cartas
de Belmonte, que una expedición facciosa mandada por un sobrino del tigre
convaleciente, se acercó el domingo 16 de febrero, a las murallas de dicha
villa, y vista la resistencia que presentaron los paisanos armados, unidos a
sus partidas que accidentalmente se encontraban en Belmonte, desistieron los
facciosos, y se retiraron por Villaescusa de Haro, de donde saquearon cuanto
hubieron a las manos, llevándose varias
personas, continuando la marcha por Fuente del Espino y demás pueblos pequeños,
cometiendo toda clase de excesos.
Parece que se
presentaron en Belmonte once rezagados que pidieron indulto; estos aseguraron
que de cuatro compañías de Infantería que salieron en la expedición, se había
fugado cerca de la mitad. Absorbida toda la atención del Gobierno y sus
paniaguados en los resultados de las elecciones, se muestran insensibles a todo
lo que tenga relación con su objetivo favorito y primordial. Está visto que si
la desgracias no tocan muy de cerca a los ministros, como sucedió la Duque de
Frías y al Señor de Cañas, no se ven muestras ni las más leves de sensibilidad.
Bien activamente libró el primero una gruesa suma de miles de duros, salida por de pronto de las arcas
públicas, para el rescate de pariente; y con no menos celeridad dispuso el segundo
marchase un escuadrón a la provincia de Albacete a vengar el ultraje recibido
por los Caribes, que la infestaban hasta entonces a las anchas e impunemente,
En cambio el Gobierno reúne más y más tropas en las inmediaciones de la
capital, como si temiese un día de juicio, pues no satisfecho con haberse
traído las de la Mancha y Toledo, ha
mandado venir las de Albacete. Se asegura que Fajardo, con la poca tropa que
tiene a sus órdenes, ha llegado a Ocaña. Esto no necesita comentarios; está al
alcance del más lerdo.
29
de Septiembre de 1840 “El Constitucional”
Un capitán del
regimiento provincial de Ecija, nos acaba de manifestar cartas del ayudante de
su regimiento y otros oficiales, con fecha 22 desde Belmonte, en las que dicen
que aquel brillante cuerpo con fuerza de 800 hombres se había sustraído de la
despótica autoridad del general Aldama, que se apoderó de él con engaños cuando
venía desde Belmonte a Arganda con el objetivo de tomar parte en le patriótico
pronunciamiento de Madrid, y que por fin, si no logró sus deseos entonces, los
ha conseguido ahora pronunciándose en el mismo pueblo; añadiendo que no se
había alterado la disciplina de aquel valiente cuerpo porque tiene virtudes.
Miguel Ángel Vellisco
Bueno
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