Ya habrá tiempo (en unos días) de que os la proyectemos íntegra, pero sirva como anticipo esta sabia selección que el amigo Fabián Castillo ha realizado para esta atractiva sección de Pedroñeras minuto a minuto. Estábamos en 1983 y era habitual por aquellos años que, cada domingo, RTVE retransmitiera su misa matutina desde una localidad de nuestra Piel de Toro. Esta vez le tocó a Las Pedroñeras, en pleno corazón de la Mancha, y todo se preparó con el mayor boato para ofrecer al exterior nuestra mejor imagen. Acudieron todas las cofradías con sus respectivos estandartes, la banda de música, la rondalla, la iglesia estaba hasta la bandera... abarrotá, como nunca. Hubo ofrecimientos, lecturas, una homilía por parte de don Jacinto muy bien trabada (que dio que hablar, no obstante), todo ello adobado con actuaciones puntuales de la rondalla y la banda municipal. Todo salió redondo en esta especie de representación teatral en la que -parafraseando una de las greguerías de Ramón Gómez de la Serna- se nos colocó de la manera menos natural para salir lo más naturales posibles.
Pero frente a la seriedad programada que reinaba en el templo, tomado por las cámaras y los focos, afuera, en la calle, al inicio, la chiquillería correteaba de alegría para acá y para allá, sabiéndose grabados por la tele, y grabados para siempre. Fuera no había examen; dentro, sí. Dentro se ejecutaba un ritual cuya parafernalia se había dispuesto calculadamente en el marco de una rancia estética. Fuera estaba la vida.
Había dos opciones -lo recuerdo muy bien-, quedarse en casa para ver la misa en directo o acudir, como niño que yo era, a la iglesia e intentar que "te sacaran" y, así, "salir". Yo me quedé en casa; mi hermano acudió y chupó cámara por un tubo el tío. En fin, un documento histórico para nuestro pueblo que nos proyecta imágenes que parecen sacadas de cuadros de Gutiérrez Solana, de Darío de Regoyos o Ricardo Baroja. Figuras de un retablo. Un documento que también nos trae el recuerdo de los que ya no están entre nosotros, conscientes también de que cada año ese número irá ampliándose hasta que la filmación quede convertida en un algo más fosilizado, en una reliquia, en un recuerdo de lo que fue por aquel entonces un día glorioso para nuestro Lugar, porque en esos momentos salíamos en los televisores de toda España.
Cuéntanos tú también los recuerdos de aquel día.
Había dos opciones -lo recuerdo muy bien-, quedarse en casa para ver la misa en directo o acudir, como niño que yo era, a la iglesia e intentar que "te sacaran" y, así, "salir". Yo me quedé en casa; mi hermano acudió y chupó cámara por un tubo el tío. En fin, un documento histórico para nuestro pueblo que nos proyecta imágenes que parecen sacadas de cuadros de Gutiérrez Solana, de Darío de Regoyos o Ricardo Baroja. Figuras de un retablo. Un documento que también nos trae el recuerdo de los que ya no están entre nosotros, conscientes también de que cada año ese número irá ampliándose hasta que la filmación quede convertida en un algo más fosilizado, en una reliquia, en un recuerdo de lo que fue por aquel entonces un día glorioso para nuestro Lugar, porque en esos momentos salíamos en los televisores de toda España.
Cuéntanos tú también los recuerdos de aquel día.
Montaje de Fabián Castillo Molina
Texto: Ángel Carrasco Sotos
Montaje: Fabián Castillo Molina
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