LA VENGANZA DE RAIMUNDO Y FELIPÓN “¿Y LO MÍO PA CUÁNDO?” (capítulo 34) | Las Pedroñeras

Etiquetas

Adivinanzas (1) Ajos (67) Álbumes y cromos (13) Anécdotas (6) Antropología médica (2) Arqueología (5) Artículos en otros medios (5) Artículos en Pedroñeras 30 Días (71) Aviador Laureado Félix Martínez (7) Basura Espacial (9) Belmonte - por Miguel Ángel Vellisco (120) Bodegas antiguas (1) Calendarios (1) CALLEJERO (15) Cancionero (57) Carlos Martínez Rubio (1) Carnaval (1) Censo - Población (22) Chozos (4) Cine (1) Cortometrajes (1) Creencias pedroñeras (3) Cuentos y chascarrillos (4) Curiosidades (65) Documentos de Ignacio de la Rosa (9) El rincón de Teresa (20) Entrevistas (14) Fiestas (30) Folclore (2) Folclore infantil (31) Fósiles en Pedroñeras (2) Foto semanal (11) Fotografías y postales (56) Fotos del Lugar (13) fútbol (1) Grupos de música (1) Guerra Civil (10) Habla pedroñera (89) Historia pedroñera (224) Historias de Vicente Sotos (2) Huertas pedroñeras (6) I.E.S. Fray Luis de León (11) Iglesias y ermitas de nuestro pueblo (10) Instituto (4) Inundaciones en Las Pedroñeras (7) Julián Escudero Picazo. (11) La sección de Enrique Guijarro (3) La sección de Fabián (238) La sección de Vicente Sotos (66) Libros (5) Libros de las fiestas (8) Libros sobre Pedroñeras (99) Literatura sobre Pedroñeras (37) Lugares emblemáticos (2) Mapas (4) Mata Hermosa (4) Medicina popular (1) Memorias (44) Microrrelatos (9) Miscelánea (16) Mojones (3) Molinos (1) Motes de Pedroñeras (10) Museo del labrador (11) Naturaleza de nuestra Mancha (21) Naturaleza en Pedroñeras (12) Neruda (1) Noticias Pedroñeras (25) Origen del nombre de Pedroñeras (3) Paisajes pedroñeros (1) Palabra de Saturio (5) Patrimonio pedroñero (23) Pedroñeras fuera del pueblo (1) Personajes famosos (37) Platos típicos (2) Pluviometría de Pedroñeras (126) Poesía (1) por Pedro Sotos (3) Pregón de las fiestas (3) Pregones (1) Prensa histórica-Noticias históricas (58) Prensa y revistas (3) Promoción (1) Quinta 69 (2) Quintas (3) Recetas pedroñeras (15) Refranes con ajo (1) Relaciones de Felipe II (1575) (8) Relatos (4) Reportajes fotográficos (16) Riada del 2009 (1) Rutas pedroñeras (1) Santiaguillo (5) sellos (16) Tesis Mª Pilar Martín Alonso (11) Toponimia (86) Usos y costumbres pedroñeras (17) Varios (22) Viajecetes (13) Vídeos (61) Virgen de la Cuesta (6)

domingo, 22 de mayo de 2022

LA VENGANZA DE RAIMUNDO Y FELIPÓN “¿Y LO MÍO PA CUÁNDO?” (capítulo 34)

 


por Vicente Sotos Parra



En el capítulo 10 de las historietas de Felipón la podéis encontrar lo que le pasó en el concurso de galeras engalanadas en San Isidro de ese año.

Cinco años después, y sin que a Raimundo se le hubiese entregado el montante del premio que era de 350 pts. pensó que ya había pasado el tiempo suficiente para que el Excelentísimo Señor Alcalde le hubiese entregado esos cuartos.

¡Hermosón, se lo vamos a pedir delante de to el lugar! Que a cabezón no me gana nadie, y menos ese zángano, holgazán, mostrenco, gañan, que se harta de comer desde que lleva la garrota de alcalde. Así durante dos días al atardecer el tío y el sobrino se recorrían las lindes, y los arcenes de la carretera segando cardonchas abundantes entonces hasta lo que era la cuesta Grande, almacenando dos galeras de cardonchas

Así, llenando cuatro espuertas de tierra en las cuatro esquinas de la galera, y un capacho en el centro del cual se apoyaría un tronco de pino y el otro que formaría la cruz. Queriendo emular la Cruz del Coso, formando sus arcos con las ramas de pino que soportaban a las cardonchas. Cosas más hermosa no se vio en el lugar, pues los colores de las ramas verdes de pino con esos colores vivos rosas amoratados de las cardonchas, resaltaban de una forma espectacular. Le añadimos una cruz de pino natural, con el frontal pelado en letras grandes se podía leer “¿Y LO MÍO PA CUÁNDO?” la blancura del pino pelado y el negro del carbón de las letras destacaba una barbaridad que todo el mundo se quedó pasmao, sin adivinar el mensaje, pues lo normal era que llevase la inscripción de I.N.R.I que muchos tampoco sabían lo que son las iniciales del título en latín que Poncio Pilatos escribió  sobre la cabeza  de Jesucristo en la Cruz  (Juan 19:19): Iesus Nazarenus Rex Iudæorvm 'Jesús de Nazareth, rey de los judíos' (en latín).

Fueron diez las galeras engalanadas ese año y también le tocó salir en última posición. Llegó el momento de hacer su entrada por Entre Capillas la galera, tirando de ella sus mulejas engalanadas para la ocasión. Esta vez mejor vestidos para el acontecimiento con pantalones de pana y camisa blanca los dos, y las albarcas recién estrenas que el hermano Trueno tuvo que tomarle las medidas a Felipón tres veces para ajústaselas al 49 que era el número del chiquetee calzaba. El Excelentísimo Señor Gobernador dio la orden de que la Guardia Civil parase la galera y le llevasen al dueño a la tribuna. Así lo hicieron, llevando a Raimundo  a su presencia, llegando este con los calzoncillos a punto de ser manchados por la cagalera, de tener ante sus hocicos al Sargento, al Alcalde,  al Cura, y al Gobernador, que pidió que dejara de tocar la banda para poder escuchar lo que le podía decir aquel hombre con su planta de rustico campesino, haciéndose un silencio sepulcral.

---Dígame buen hombre por qué dice usted en el palo “¿Y LO MÍO PA CUÁNDO?”... pues nadie de los presentes hemos sabido descifrar lo que quiere decir.

Quitándose la boina y cogiéndola con las dos manos empezó a darle vueltas, frunció el entrecejo,  mientras acachaba la cabeza Raimundo.

--- Mire usted, su excremencia, hace cinco años fuimos los ganadores de la galera mejor engalanada y entodavía no he visto los cuartos ya que su excremencia del Señor Alcalde no ha tenido a bien dármelos, con lo que nos costó al chiquetee y a mí coger las aleagas que los pinchos se nos clavaron en to el cuerpo.

Ya fuese por la voz entrecortada de Raimundo, los aludidos asimilaron que les llamaba sus excelencias no dándose por enterados que les llamó excremencias.

---Este año hemos querido traer una Cruz como la que tenemos en el Coso.

--- ¡Eso es verdad!... Alcalde.

--- ¡Bueno sí, pero es que..., bueno sí, pero es que…, bueno sí, pero es que!

---Ni bueno, ni peras, ni  leches, ¿acaso no sabes que en esta nuestra Patria tenemos que ser ejemplares para que se nos respete? Y tú por lo que veo dejas mucho que desear, siendo tu conducta inaceptable para seguir en este cargo. En esta España Grade y Libre. Haciendo una soflama del régimen, etc…, etc.

Soltando un discurso patriótico de aquellos tiempos que duró una larga hora en todo este tiempo, Raimundo no dejó de darle vueltas a la boina, y de mirarse los pies. Cuando se cansó el Excelentísimo Gobernador de su discurso político, para rematar dijo:

---Es la galera mejor engalanada y hace honor a San Isidro con las flores silvestres, a la vez homenajeando a  la Cruz del Coso.

---¿Cómo se llama este santo hombre?

---¡Yo me llamo Raimundo para servir a Dios y a usted…, excremencia!

 ---Bien, pues lo tuyo ya es hora que se haga justicia, y ya te lo digo yo,  de mañana no pasa y, como has demostrado tu paciencia y tu buen hacer, este año también eres el ganador. Por lo que mañana pásate por el ayuntamiento que tendrás tus cuartos, que tantos pinchazos te ha costado ganarlos. ¿Algo que alegar el jurado? Todos estuvieron de acuerdo.

Le faltó tiempo a Raimundo para llegar a la galera.

--- ¡Arreaaa las mulas, hermosón, que tengo la boina llena!

 --- ¡Pero si la tienes  en el culo, chache…,  en vez de llevarla en la cabeza!

La llevaba en el culo pues la pasta le chorreaba por la pata alante y no quería que nadie se diera cuenta que se le había aflojao el muelle del miedo que pasó llamándoles al Alcalde y al Gobernador excremencias en sus hocicos.

A la mañana siguiente marcharon peripuestos. Allí tienes al tío y al sobrino a que le dieran los cuartos de los dos años.

 El acalde se le quedó mirando…, diciéndoles de manera altanera, con los brazos en jarras, y las manos en los ijares, montado en cólera:

--- ¡Se me remueven las tripas!..., en el copón…, en vuestra ralea. Sois los dos uno tarambanas…, traspellaos…, unos… destripaterrones. Toma tus cuartos, que te los doy de mi bolsillo porque quiero y no porque te los mereces, pedazo de carne con ojos, y procurar quitaros de mí vista no sea que cambie de opinión y saque del cajón la pistola y me líe a tiros con vosotros.

Le dijo Felipón a su chache:

--¡Cuando sopla el viento hay que ablentar. Vámonos antes de que cambie, chache!


(CHASCARRILLO)

También ese año ganaron,

uno con las aliagas y las amapolas.

El otro, con las cardonchas.

 Por eso cuento la historia.

La venganza se cumplió,

aunque la mitad del premio

Raimundo se lo gastara

en comprar jabón.


El sabio, de su patrimonio ganado por medios honrados,

ni presumirá ni se avergonzará.

(EPICTETO). 

No hay comentarios:

Publicar un comentario