Cruz de la Rioja.
Continuamos en este número dando
cuenta de los cruces antiguas que pueblan o poblaban nuestro término municipal,
algunas aún a la vista de todos, otras desaparecidas aunque dejando en
ocasiones su nombre al paraje, en casos aún vigente. Las tratadas hasta ahora
son: la cruz Domingo Lorente, de Alejo, la Cruz Blanca (ver entrada), de Marchantes, de
Manuel Revenga, la Cruz Cerrá (ver segunda entrada), la del Ángel, la de Ciríaco y la cruz de
Bonifacio Araque (tercera entrada). Las de este mes son: la Cruz de Piedra, la de la Rioja, la de
Tortas y la cruz de Zarco.
Cruz de Piedra.
Cruz de Piedra:
Se
halla aún junto al llamado camino del Andrés, en la zona de La Esperilla, en una tierra plantada de viña (en el momento en que escrito). Consta la cruz en el frontal de una
piedra, tallada en su superficie. Es pequeña y aún en buen estado. Nadie sabe
darme noticia cierta de lo acontecido en este lugar, como tampoco a quién
estaría dedicada. Parece antigua.
Cruz de la Rioja:
Muy
cerca de la anterior, junto al camino de Miravillas, actualmente en una tierra
plantada de viña. Es posible que deba su nombre al apodo de la persona que aquí
muriese. Es de grandes dimensiones en comparación con otras. Hay quien confunde
esta con la anterior, de modo que se le llama también Cruz de Piedra. Poco
más sabemos de su origen.
Cruz de Tortas:
Estaría
junto al camino de Manjavacas, cerca de la Laguna del Huevero y al pasar el chozo Araúz. No queda rastro de ella, como tampoco memoria de su emplazamiento,
aunque aún sigue dando nombre al paraje. Todo apunta a que su nombre proceda del apodo
de quien murió en este lugar.
Cruz de Zarco:
Estaba
en la zona llamada Matallana y se cita también en el mapa de 1907 sin que se
dibuje en él, por lo que podemos pensar que ya hace un siglo estaba
desaparecida [No obstante algún informante me dijo recordarla, de piedra de una sola pieza, ya muy ennegrecida por los años]. A la acequia que pasa por este paraje se le denomina “Acequia de
Cruz de Zarco”. No es otra que la también llamada “Acequia de la Hoya”,
“Acequia Paleduz” o “Acequia del paleduzar”, que en textos antiguos es
denominada “Acequia de la Oyuela”. Zarco sería el apellido de quien perdiese
la vida en este sitio. Aún da nombre al paraje.
[Este artículo fue publicado por primera vez en el periódico local Pedroñeras, 30 días, nº 117, julio de 2011].
©Ángel Carrasco Sotos
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