A veces el otoño te sorprende con estas cosas. El otro día fuimos a la huerta y nos encontramos estos hongos en los chopos. Ya podréis imaginar por la foto que el tamaño es importante. Lo malo es que no sean comestible... ¡una lástima! Me he puesto a investigar un poco y resulta que son hongos pata de caballo u hongos yesqueros (Inonotus hispidus o Fomes fomentarius), que crece, al parecer, en árboles aún vivos, pero en malas condiciones, y es que estos chopos ya tienen unos años y la mitad están medio muertos, con varias de sus ramificaciones secas.
Se llaman hongos yesqueros porque sirvieron desde antiguo para encender el fuego por su fácil combustión. De hecho, fijaos, aquel hombre momificado que se encontró en un glaciar entre Italia y Austria, como Ötzi fue bautizado, muerto hacía unos 3.000 años, portaba en su morralete trozos de este hongo yesquero. Aunque también, según parece, tuvo también un uso medicinal para detener hemorragias. En fin, ya sé (sabemos) algo más de estos hongos. Os dejo por aquí unas instantáneas.
Segundo ejemplar
ÁCS
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